“Piensa en tu ser mas querido, el que ames con toda tu alma, aquel que primitivamente esta en tu corazón, probablemente tu hijo, tus padres o secundariamente tu esposo o esposa, ¿que es lo primero que se viene a tu mente?, excava en lo mas profundo de tu alma y todos aquellos recuerdos de esa persona se vieran frente a tus ojos, momentos bellos momentos malos, pero al fin aquellos hechos que lo hacen tu ser mas preciado. Escribe su nombre en ese papel que tienen frente a su mesa y cada uno deposítelo en esta caja que tengo acá adelante. No tengan miedo, hagan que la paz interna fluya a través de esas letras que salen de ese lápiz que tienen entre sus manos”.
En ese momento aquella sala de conferencias repleta de aproximadamente doscientas y tantas personas se lleno de un espíritu abrumador, uno a uno se fue levantando de sus sillas, dirigiéndose hacia donde aquella caja de madera se encontraba, inerte en el centro de la tarima, su conferencista, un líder espiritual proveniente de las Amazonas, dirigía aquel festín existencial, su discurso estaba por terminar y sus seguidores alumbrados por su conocimiento, tenían una fe increíble.
‘’ Ahora señoras y señores, diríjanse a sus casas, y llamen a ese ser querido, si esta con ustedes denle un abrazo, díganle lo mucho que lo quieren, si tienen años que no ven a esa persona búsquenla que mañana quizá podría ser tarde, hazlo ahora, querido amigo no esperes cuando sea demasiado tarde”
Y un minuto de silencio abrumo aquella sala hasta que el líder espiritual Kamir salió por aquella puerta delantera, momento en el cual las personas con lagrimas en sus rostros, arrodillados otros, desplomados unos tantos yacían en ese lugar.
En unos pocos minutos aquel sitio se vio abandonado, y la jornada para Kamir había terminado. Este, se fue hacia el centro de la tarima por aquella caja, y se dirigió hacia el callejón detrás del teatro, abrió el candado que encriptaba aquel pedazo de madera y se digno a arrojar esos cientos de hojas blancas hacia la basura.
Kamir ignoraba que en la oscuridad de la noche, una persona divisaba a lo lejos su acto vergonzoso, un admirador algo obstinado, con ganas de conversar un poco con su líder espiritual, se había quedado para cruzar unas palabras con el, pero esta persona se sintió engañada y se fue a su casa decepcionada.
Al otro día la joven que había perdido la fe en el callejón. No supo que mas hacer sino volver a dicho sitio, tomo su remera y se dirigió hacia el teatro, al llegar tomo una bolsa e introdujo aquellos papeles ya algo sucios unos mojados otros rasgados y se fue a su casa.
Al día siguiente en otro lugar de la ciudad te encontrabas tu, en tu lugar de trabajo lleno de espíritu de alegría, en horas de la mañana proponiéndote a desayunar en el cafetín, momento en el cual recibes una llamada, abres tu celular y su numero es desconocido arqueaste las cejas y contestaste.
-Buenos días te dijo, una voz de mujer.
No te dio tiempo de responder, ella prosigo de inmediato,
-Soy una chica que estuvo en aquella conferencia hace par de noches, solo te llamo para decirte que, no hiciste caso a lo que nos dijo nuestro líder espiritual Kamir. No llamaste a ese, tu ser mas querido, no te preocupaste por ir a visitarlo, ni dejar una carta, ni nada menos, no te importo la frase, que nos nombro nuestro líder, “mañana podría ser demasiado tarde”. ¿Sabes?, pues hoy es demasiado tarde, esa persona a la que tu mas quieres en este mundo ya no esta, se esfumo, no se encuentra entre nosotros, y yo me encargue de darle descanso a esa alma, esta en un mejor lugar ahora y tu por tu prepotencia y orgullo no te pudiste despedir. ¡Esta muerta! Y ella colgó, dejando un silencio infernal a su paso.
Tu mundo se vino abajo y semanas después de su funeral. Una carta llego a ti, con una explicación detallada por la cual este horror paso, una firma con el nombre de Stef, finalizaba aquella carta, y una postdata al final de la hoja. ‘’ Te anexo una segunda hoja, con las ultimas palabras escritas por tu ser mas querido” , perdóname por hacerte pasar ese mal rato pero las cosas son ahora o nunca.
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